martes, 27 de septiembre de 2011

Destino

Que no sean sólo suspiros que desgarren unas palabras,
ni un instante que se ahogue entre kilómetros de distancia.

Fue siempre destino el que aparecía en escenario,
ESE que no actuaba sin guión recitado,
sino que surgía entre mañanas sólidas que tenían vida.
Mañanas de recuerdo que todavía mías,
revivo a solas pero contigo en mis días en Sevilla.


Que no sean sólo suspiros que desgarren unas palabras,
ni un instante que se ahogue entre kilómetros de distancia.

Añoranza, roja pasión, y melancolía lejanas,
renuevan sentimientos de dolor en mañanas frescas, sonadas.
No habrá noche tan larga como una última de pocas palabras,
ni un corazón que supere al mío que tú tienes entre tus sábanas.

No quiero recordar su nombre, pero destino lo grabó en mis entrañas.


Que no sean sólo suspiros que desgarren unas palabras,
ni un instante que se ahogue entre kilómetros de distancia.


Estefanía


viernes, 22 de julio de 2011

Juego de palabras

Esta mañana de nuevo enturbié la mirada de odio
para cambiarla por un juego de palabras.

Cualquier gesto anima a cualquiera a seguir intentándolo,
recuerda que es tiempo de todo lo que no
puedes dejar para mañana.

Benditas las ganas de ti
y bendita la noche que alumbra tu fe.

No seré yo quien enmascare tus hechos
con sosiego y calor veraniego;
no seré yo quien vislumbre por ti una alegría
que empañe tu sedienta melancolía.

No apuesto por hacerte daño,
pero ya que estamos, que al menos pruebes tú
algo de tu juego de palabras.
Que recuerdes a cada instante tus desplantes
y la turbia mirada de odio.

Porque cada paso que doy me recuerda a todo,
porque todo fue y ha sido eso que tú haces,
y porque por eso soy como soy.

No acostumbro a abrir el cajón de lágrimas,
ni a secarlas con el primer paño que pase,
pero hoy lo he abierto, y mejor hacerlo hoy
que dejarlo para mañana y que siga doliendo más adentro.



Estefanía

martes, 19 de julio de 2011

Cosas que decirte

Dejé de escribirte en solitario,
aun cuando mi mano llegaba a recordarme
la añoranza de unos versos de despedida.

Pero ni tan siquiera fue tan fría
como un simple reojo tuyo, que al lado
de mi consuelo, rememoraba los ratos a solas,
pero contigo.

Mi venganza no vendrá en frío,
pero sí preparada con ira y un poco de sinrazón;
no ahogaré mis ganas en dos porque torturaría mi conciencia,
pero domaré a mis sentidos para no quitarte más ropa
de la cuenta.

Murmullos en mi cabeza, que no estorban
pero si agilizan el desastre.
No fue más que una simple despedida
con un toque rancio de miradas.
Esperaré tu llamada, no por arrepentimiento,
pero sin con ganas, y recordarte que aun estoy
entre tus desvelos y que si no muero es porque aun
me quedan muchas cosas que decirte en la almohada.


Estefanía

miércoles, 18 de mayo de 2011

Perdí la costumbre

Perdí la costumbre de aparecer en silencio
en tus sueños ácidos de luna llena,
y arrebatarte de la almohada la despedida que no fue.
Pero comencé a tener pesadillas
con la silueta de tu enojo,
con el contorno de tu figura, ya escueta.

Escribí versos de descaro que aun muestran
su condolencia, y del todo perdida,
me arrastré al cosmos del abismo "contigo y sin ti."

Y aunque te parezca mentira aun vivo
en el exilio que tú habitas,
aunque ya no hablemos el mismo idioma.

Me costó ser yo misma, disimular entre horas
todo lo que me queda por decirte.
No disimules, si la carga fue pesada,
aguanta con sudor y lágrimas el peso de la compostura.

Y no me roces con la mirada, porque puedo
empezar a quererte.

Porque aunque no pronuncies palabra,
tampoco tus ojos me hablaron cuando por un
momento fuimos un poco más que dos.

Demuestra ahora que la vida sí era como aquella película,
en la que todos sabemos el final pero nadie se atreve a
                                   actuar.


Estefanía

miércoles, 11 de mayo de 2011

Mi piel y tu cuerpo

Mañanas de abril en las que las ganas
morían por segundos dentro de mí;
y muriendo contigo el fuego que avivé
en otros momentos no de rabia, pero sí de olvido.

Decidí vencer la pereza de pensarte,
cuando a veces sin ganas pasabas
por el susurro de mis pensamientos.
Decidí escribir porque nadie entendería
mi sueño de tenerte, de abrazarte...

Ahora que nada perdí en el camino
que todo lo que me quede sea ganar sin miedo
y resistir el orgullo que se asome por tu cuerpo;
ahora que el pellejo de mi piel se muda de dueño,
me arropo entre tus desvelos del calor del invierno.




Estefanía

jueves, 24 de marzo de 2011

Primavera

No es tiempo de flaquear, amiga;
resurrección en época verde y constante,
otras veces ni un manto de estrellas
hubiese sido bastante para saciar mi cordura.

Porque no hay mal que no dura
ni lustros que sentencien las frías ganas
de primavera en mis venas.
No hay manera, de mantenerme serena
en noches impermeables a tus destellos.

Y mira si muero en noviembre
que aparezco desenterrada entre
los desvelos de mi silencio,
y mira si te siento que hoy te escribo
este verso, derramando la paz
que llegó con marzo,
y ahogando las penas que se asomen
entre el aroma del azahar de tu patio.

Espera que te cuente,que tus sueños
se desplomasen no fue del todo en vano.
Una batalla se ha perdido cuando
al final del camino no hubo gloria ni empate,
y tú la has ganado por haber sentido
la desterrada libertad en tus manos
y haber servido de moraleja a cualquiera
que no lucha,.... sino que espera.


Estefanía

lunes, 7 de marzo de 2011

El abrazo mudo

Yo nunca aprendí el guión ensayado que recitaste,
tampoco un grito fue en vano en el aire;
siempre me arrodillé en versos para cantarte,
para caminar juntos como lo hicimos antes.

Nos fundimos en un abrazo que nunca había soñado,
y entonces entre las palabras que iban rozando tu pelo,
me hiciste temblar, y no sólo tú,
tus manos acariciaron el corazón que vivía en acero...
oxidado.

Me perdí en el cementerio de tu sonrisa cálida,
en el mar de tu silueta, ya gastada.
Ahora aprendo a querer estar contigo,
a echarte de menos cuando te disfrazas de sentimientos.

No tenía ganas de sentir,
las fuerzas se desquebrajaron en un estallido de nostalgia,
esa maldita que hoy vuelve para quedarse
por una horas en mis palabras.





no actué; inventé un personaje para quererte...


Estefanía

martes, 22 de febrero de 2011

Tus hechos...conmigo

Ya no necesito que me destruyas más,
que acaricien tus cadenas en mi pecho
sediento de cariño, ahogado en silencio.

No te esmeres en hundir la moral
que nació de otro mundo,
ahora que vaga entre las tinieblas del subsuelo.
Ni desmientas tus hechos con frases
que no arañan sino asesinan mi aliento.

Ni un frío y roto amanecer extraño,
ni un consuelo que queda ya contigo.
Una apretada risa salió de pronto
de entre mis labios,
y un suspiro que al alba un gallo escuchó
....cantando.

Cremallera de acero en el pecho
que no ahonda en los silencios,
pero sí en la penumbra de tu esqueleto
donde quedarán para siempre grabados
tus hechos.


Estefanía

domingo, 20 de febrero de 2011

1995

Un estrecho vacío quedó entre sus páginas en blanco
y mis versos amargos; un gris desencuentro
cubrió la calma sobre la que yacía mi olvido.
Tampoco un suspiro, pero sí la conciencia
dormida entre horas.
Hubo un momento en el que me temblaron las piernas,
tras recibir el perfume silencioso de los años.
Ni siquiera éstos lograron olvidarte,
ni siquiera mis ojos saciaron las ganas de imaginarte.
Sólo siento no haber sido yo misma,
sólo siento que tras los días
aun no sepas con quien compartiste tu vida.


Estefanía

jueves, 10 de febrero de 2011

sin ánimo de lucro

Aun imitando tus gestos siempre fui yo la culpable,
el único mal de esta enfermedad fue haberte escuchado.
Seguirte el juego fue lo peor que pude haber hecho.
Hoy te alimentas de mis desvelos
y yo sufro a solas el miedo de no quererte.
Tu absurda mente te volvía a jugar malas pasadas;
y ahora respiro por no volver a mirarte.
Y me duele, saber que estás ahí pero tan lejos,
no pude ni tan siquiera abrazarte en momentos de huidas;
pero tu orgullo crece como el árbol de la acera.
Hoy es él quien no me escucha,
el que me pide que cambie mis actos,
pero no puedo; me prometí una noche a solas
que no volvería a sufrir por tu daño, ni que ésto
pudiese chocar con las horas que habíamos pasado.
Hoy, tocada y hundida de nuevo por tus palabras,
entierro el hacha de guerra donde sigue guardada
mi ALMA.



Estefanía

jueves, 3 de febrero de 2011

Libertad de qué?





22:42. "El gobierno ha recurrido a la censura total, a la intimidación y hoy a una serie de ataques deliberados contra periodistas llevados a cabo por turbas pro gubernamentales", afirmó en un comunicado de prensa el coordinador del CPJ para Oriente Medio y el norte de África, Mohamed Abdel Dayem. 


20:40. Sal Emergui, el enviado especial de la radio catalana RAC1 y colaborador de La Sexta y El Mundo, también ha sido agredido mientras conectaba por teléfono con el programa de tarde de la emisora. La cadena ha explicado a Efe que tres o cuatro jóvenes se han acercado a Emergui para cogerle el móvil y que, tras un forcejeo en el que ha recibido un par de puñetazos en el estómago, el periodista ha conseguido librarse del grupo y volver ileso al hotel.




Público.es

miércoles, 2 de febrero de 2011

Como la vida misma

Me gusta escribir a media noche, cuando sólo muebles
y sirenas hablan entre sí y el silencio me sobrecoge.
Como la vida misma.

En las calles los árboles se esconden con miedo,
el alma de la noche oscurece,
y la gente se limita a soñar con deudas resueltas
y pagos que cobran hasta la vida.
Supe que el llanto no se iría de pronto,
pero pensaba que se apiadaría del más débil.
Hoy ese hombre llamó a mi puerta,
recibí por segundos su pánico
y no fui capaz de devolverlo a la vida.


martes, 18 de enero de 2011

Mejor...ahora

No me deshice de una sonrisa aun cuando
todo encaminaba al desenfreno,
ni atornillé un llanto sin lamento alguno
cuando la esperanza se desvanecía en murmullos.

Y llegó el aire primaveral que necesitaba
para que todo fuese perfecto,
y calaron rayos imparables de sosiego
que apenas me frenaban.

Siempre he dicho que nunca me arrepentiría
de haber hecho cualquier cosa;
aun en derrota supe felicitarme
porque no me persiguió la cordura.

Hubo días en los que añoré
no haberlo hecho, no haber saciado de ganas
las mías, que no llegaron a convencerme del todo.
Vivo mejor haciendo lo que me presta,
con una efímera gota de lamento,
que prestarme a la normalidad de las cosas
y vivir con la angustia de no haberlo hecho.


Estefanía

miércoles, 5 de enero de 2011

Hoy mismo

Supe a ratos que lo nuestro moría por días,
tu amor fraternal de primavera
nunca llegó a mis brazos, que acurrucada
me mantenían callando de golpe.

Hoy tus brazos están hechos de hielo,
y no un tortazo ni magulladuras,
pero si un abrazo roto quedó entre nosotros
sin apenas herirnos del todo.

Palabras más duras que el silencio mismo,
que no son verdades, pero si aumentan
el ego que tú misma construiste,mientras,
el mío vagaba por el subsuelo de la cobardía.

Ni noches ni días llegaste con el corazón deshecho
con una simple sonrisa, ni con vocal
de arrepentimiento que jamás mis oídos descubrieron.

No me quedan más fuerzas que el egoísmo
que en ti descubrí,
ni más amor que el roto que desprenden
mis besos falsos de bienvenidas.

Ahora no soy yo quien llora desconsolada y sola,
ahora eres tú quien acobardada por el futuro
te callas y respiras, tragando despacio el veneno
que sobró conmigo.

lunes, 3 de enero de 2011

Por momentos

El agua llegó al arroyo cansada,
tu ingratitud se coló en ella despacio
sin imaginar tan siquiera que le daría
tal portazo a su descaro.

Ni siquiera yo sabría decir como el agua
llegó sola al arroyo,
pero a esas horas ya era tarde para
remediarse, y aguardé las horas
para estar contigo.

Al menos un abrazo o una palabra sola
hubiese bastado para olvidar
de un suspiro los años que pasaron
pero que siguen con fuerza ahí contigo.

No olvides que cada rama que llevó el arroyo
acogió a su paso lágrimas que ahogaron,
pero maestras de una nueva vida para vosotros.